Acompañados por la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, se plantaron en el Parque Central 5 árboles de Jacarandá en homenaje a los 15 fallecidos que en un viaje en ómnibus perdieron la vida camino a las Termas de Río Hondo.


El 1 de julio de 2019, un ómnibus de larga distancia que trasladaba a un contingente de jubilados desde Mendoza hacia las Termas de Río Hondo sufrió un accidente. En ese entonces, los viajantes asistían al centro de jubilados “Gimnasia Feliz” de la Ciudad de Mendoza y habían decidido pasar unos días de descanso cuando el colectivo en el que se desplazaban volcó, por lo que 15 personas perdieron la vida y otras 44 tuvieron que ser hospitalizadas.

Con el apoyo del municipio y por decisión de familiares, amigos y compañeros de las víctimas, se recordó, de una manera especial  en el parque Central, a aquellos que, si bien ya no están físicamente, siguen presente en el corazón de quienes los amaron. La iniciativa tuvo como acción central la plantación de 5 árboles de Jacarandá para simbolizar la perennidad de sus almas y generar al mismo tiempo un ambiente de conmemoración permanente.

Para realizar la plantación, los familiares contaron con la colaboración del personal municipal que se encargó de dejar todo en condiciones. Algunos de los presentes arrojaron pétalos de rosa o pequeñas cartas en los sitios donde se plantó, algunos llevaron carteles y fotos, otros prefirieron expresar su dolor con palabras de desahogo.

Muy conmovido, Germán Accorinti, hijo de una de las víctimas agradeció el encuentro y habló en nombre de todos. Comentó que su mamá, Elsa Frontalini, viajaba en ese ómnibus y expresó: “Es un momento duro para todos los que estamos acá. Quiero agradecer de corazón al Centro de Jubilados en el que tan buenos momentos pasaron nuestros familiares y humildemente a la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza por haber hecho esto posible. Me parece que plantar estos árboles representa muchas cosas. Vamos a tener un lugar para reunirnos como grupo y expresar lo que nos pasa y sobre todo para exigir justicia. Si estos árboles crecen significará que también va a crecer nuestra esperanza  y a lo mejor podamos encontrar entre nosotros la fuerza y la capacidad para impedir que estas cosas se repitan”.

Por su parte, María Teresa Gálvez, secretaria del Centro de Jubilados “Gimnasia Feliz”, agregó: “Yo también viajaba en ese momento y fue muy difícil para mí. Mi cabeza estuvo bajo el agua y no podía respirar, pero algo me dio fuerzas y pude sobrevivir. Mi tarea desde ese momento ha sido acompañar a la gente que quedó psicológicamente mal, esa fue mi misión y lo seguirá siendo”. Además, respecto a los árboles, comentó: “El año pasado la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza nos ofreció 15 árboles para plantar en homenaje, pero con la pandemia no se pudo realizar, por eso lo hicimos hoy, al cumplirse dos años de esta tragedia. El grupo que está aquí se llama “Juntos”, es un grupo de familiares y conocidos que acompañan. Juntarnos nos hace muy bien porque sentimos que algún día vamos a poder lograr la justicia que merecemos y eso nos mantiene unidos.

“Desde el momento en que ocurrió este hecho y, hoy más que nunca, sepan que el municipio está a disposición de todo lo que crean conveniente y necesiten. En nombre del intendente, a cada uno de ustedes vaya un gran abrazo”, cerró Ana Urrutia, subsecretaria de Inclusión y Desarrollo Social del municipio.