En el marco del Día Mundial del Asma (que se celebra el primer martes de mayo de cada año), brindamos consejos útiles para mejorar la calidad de vida de aquellas personas que padecen asma. Según las estimaciones de los organismos competentes, en el mundo hay más de 150 millones de afectados y, si bien aún no existe su cura total, existen métodos muy eficaces para el control de esta enfermedad.
¿Qué es el asma?
Es una enfermedad crónica de los pulmones que inflama y estrecha las vías respiratorias. Los síntomas son sibilancias, dificultad para respirar, opresión en el pecho y tos.
«Es como respirar a través de un sorbete». Así es como algunos asmáticos describen cómo se sienten cuando tienen síntomas por su enfermedad.
Sabemos mucho más de asma de lo que sabíamos una década atrás, es así que tenemos un mejor entendimiento en cuanto a cómo tratarla. De hecho, la mayoría de los asmáticos debería poder controlar la enfermedad en un 100% y mantenerla de esa forma durante toda la vida.
Algunos consejos útiles
La clave para lograr el control del asma es mantener un contacto frecuente con su médico hasta aprender a manejar su enfermedad y, luego con exámenes estipulados, continuar controlándose y así evitar recaídas.
Es importante identificar desencadenantes de los síntomas, como por ejemplo el polvo, los olores fuertes, el humo del cigarrillo, etc. y aprender a evitarlos, o a minimizar la exposición cuando es imposible evitarlos por completo. Si es posible, utilizar aspiradoras y, si no, trapos húmedos, ventilar las casas, evitar la humedad y no utilizar alfombras.