Los profesionales desarrollan el trabajo sanitario en dos etapas: primero realizan una evaluación de talla, masa corporal y presión arterial y luego realizan la evaluación odontológica (en el móvil sanitario), clínica general y “screening” o despistaje visual. También se incluyen charlas sobre nutrición, consejería sexual y salud reproductiva.
El seguimiento profesional de los chicos que requieren tratamientos es realizado por las Agentes Sanitarias y los jóvenes promotores, cuya misión es evaluar si los pacientes han continuado sin interrupción la atención profesional.
Se atendieron a 270 chicos en el colegio Lavado, y en la 4-238 s/n, a otros 60 alumnos secundarios.
El objetivo del área es realizar estos controles en todos los establecimientos escolares de la Capital y vincular a los adolescentes con los Centros de Salud Municipales.