Se trata de la realización de la «Caja Nomeolvides”, cuyo objetivo fue -a partir de letras, números, juegos de damas, dominó, etc-, estimular las funciones cognitivas para paliar los riesgos de déficit de memoria y mejorar la calidad de vida de los abuelos.
Los juegos que posibilitaron estos recursos didácticos se implementaron en un ambiente alegre y motivador, lo cual permitió la integración de los adultos mayores para cumplir con los objetivos propuestos.