Actualmente hay 11 clubes, ubicados tanto en el centro de la Ciudad como en los barrios, que funcionan de lunes a viernes en horario de tarde. «Allí se les brinda una merienda y actividades en función de lo que cada club pide», cuenta Ana Urrutia, subsecretaria de Inclusión y Desarrollo Humano. «Por eso se da un amplio abanico de posibilidades como teatro, tango, folclore, tai chi, actividades deportivas, charlas nutricionales, talleres de reciclado, de confección y coros, entre otras», añadió.
En uno de ellos, «Alegres Corazones», en el taller de teatro que encabeza el profesor y actor Rodolfo Yañez, surgió esta idea de conformar un grupo de rap. Claro, ya se habían formado otros grupos teatrales de adultos mayores que han llegado a realizar varias presentaciones públicas en escuelas y otros espacios, entonces había que buscar una manera de distinguirse. Así fue que la iniciativa del rap entusiasmó a todas y sumó a nuevas integrantes. Luego de dos años de recorrido, ensayos y hasta presentaciones en televisión, las Abuelas Raperas siguen conmoviendo al punto que fueron distinguidas esta semana por la Cámara de Diputados, luego de que así lo propusiera la diputada Beatriz Varela (UCR).
Esta distinción se suma al reconocimiento a un trabajo sostenido tanto de las abuelas como del municipio que les brinda espacios de participación en muchas actividades.
«Ya el público ha podido observar su primer libreto y ahora están trabajando en el segundo, lo que a nosotros desde la Municipalidad nos parece maravilloso», sostuvo Urrutia, quien expresó: «Si bien son todas jubiladas, estamos intentando iniciar el proceso de que despeguen como grupo, que tengan un nombre y ofrezcan su espectáculo, que vayan a teatros, que se transforme en un emprendimiento cultural y genere ingresos que ayude a lo que ellas ya perciben, que se sientan profesionales en lo que hacen».
«Estamos orgullosos de nuestras abuelas porque a través de ellas el objetivo es que el resto de los adultos mayores se convenzan de que es posible tener una vejez activa, de que llegar a esa adultez no significa no tener nada más que hacer. Pueden desarrollarse en cuestiones que por otros motivos antes no pudieron, en lo que sea que les apasione que quizá hayan tenido que postergar por determinado motivo», amplió la funcionaria.
De esa manera y con propuestas novedosas, los clubes de día buscan lograr que nuestros mayores entiendan que llegar a esa edad es la oportunidad de aprender cosas que en algún momento postergaron. «Por eso se les acerca un abanico de opciones que pueden llegar a desarrollar inclusive en temáticas que a lo mejor ni conocían. Queremos, a través del trabajo constante para generar estos espacios, que ellos puedan seguir como protagonistas además de ser grandes transmisores de experiencia«, cerró Ana.