La iniciativa apuntó a estudiantes y científicos, con el objetivo de comprender y destacar la importancia de las lechuzas en el ecosistema urbano.
Recientemente, científicos y estudiantes participaron en un taller educativo en el Área Fundacional de la Ciudad de Mendoza para entender la importancia que las lechuzas tienen en el ecosistema urbano. En los últimos meses, en el marco del proyecto sobre Biodiversidad y Salud Humana“Ecoepidemiología urbana: animales silvestres como centinelas y aliados”, liderado por investigadores de IADIZA – IMBECU – CONICET, se han colocado cajas nido para la especie de ave Lechuza de campanario (Tyto furcata) distribuidas estratégicamente en el área urbana y periurbana del territorio capitalino; lo que representa una acción más en el control biológico de especies plagas. Esta iniciativa es financiada a través del Fondo Verde para la Sostenibilidad Ambiental articulado entre la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza y el Banco Galicia.
La presencia de lechuzas es crucial para el control natural de las poblaciones de ratones que habitan la ciudad, ya que se estima que una lechuza adulta puede consumir alrededor de 1.000 ratones al año. Este proyecto busca identificar y valorar las interacciones ecológicas que suceden en la Ciudad de Mendoza.
Durante el taller, estudiantes de la escuela S 202 San Antonio María Claret aprendieron sobre las especies de lechuzas que se pueden observar en su entorno, escucharon sus cantos y sonidos, analizaron huesos de ratones encontrados en los bolos regurgitados por las lechuzas y discutieron sobre las enfermedades que los ratones pueden transmitir.
En este contexto, la incorporación de elementos naturales, la sensibilización a las personas y la implementación de acciones de gestión en el territorio favorecen la conservación de la biodiversidad urbana, así como aportan a mejorar significativamente la calidad ambiental de la Ciudad de Mendoza.