A partir del mismo, la posibilidad de ser reelectos será únicamente por un nuevo periodo.
En el marco de la consolidación y respeto a los principios democráticos y republicanos, la Ciudad de Mendoza ha tomado una decisión trascendental respecto a la duración de los mandatos de sus concejales. Por este motivo, ingresó, este miércoles por la mañana, un proyecto que busca limitar la reelección de los mismos, durando en sus funciones el término de cuatro años y pudiendo ser reelectos únicamente por un nuevo periodo.
“En virtud de las potestades constitucionales, he tomado esta determinación también como un mensaje de renovación de la política hacia todos nuestros vecinos”, manifestó el intendente Ulpiano Suarez en su discurso de este martes, respecto al tema.
Considerando que, en el sistema democrático, el pueblo ejerce la soberanía al elegir a sus gobernantes y reconociendo la importancia de la limitación en la duración de los mandatos como una medida para evitar la perpetuación en el poder, se ha dispuesto esta modificación significativa en relación con la reelección de los concejales municipales.
En este contexto, se reconoce que la medida actúa en consonancia con el ejercicio de la soberanía popular, garantizando la alternancia en el poder y dotando al sistema político de cierto equilibrio en resguardo de la república. Asimismo, se destaca que esta determinación busca propiciar la división de poderes y promover la igualdad de oportunidades en el ámbito político.
La decisión se basa en una interpretación favorable a la limitación de las reelecciones, en línea con los principios republicanos y democráticos consagrados en la Constitución Nacional y en tratados internacionales de derechos humanos.
En este sentido, se ordena que los concejales de la Ciudad de Mendoza sean elegidos directamente por los habitantes del departamento y que su mandato tenga una duración de cuatro años, con la posibilidad de ser reelectos únicamente por un nuevo periodo. Además, aquellos concejales que hayan sido reelectos no podrán ser elegidos nuevamente en el mismo cargo, sino que deberán esperar un periodo de cuatro años antes de postularse nuevamente.
Con esta medida, se busca garantizar la continuidad de políticas de gobierno sin afectar los derechos de los ciudadanos ni de los funcionarios electos, promoviendo, así, un sistema político más equitativo y transparente.