La muestra, denominada “El dibujo como monumento”, podrá verse hasta el 3 de marzo del 2024 en el Museo Municipal de Arte Moderno.
“El dibujo como monumento”, de Drago Brajak y con curaduría de Pablo Chiavazza, quedó abierta al público general. En la inauguración asistieron más de 300 personas que celebraron junto con el artista la alucinante muestra.
Brajak es una figura muy relevante en la escena de arte en Mendoza por su largo paso en la docencia y gestión universitaria en la Facultad de Arte y Diseño de la UNCuyo. Desde el año 2006 que no se veía una exposición individual de este gran artista. La actual exhibición dispuesta en el MMAMM podrá disfrutarse hasta marzo del 2024.
En la apertura de “El dibujo como monumento”, estuvo presente la Sociedad de Croatas en Mendoza, comunidad a la que Drago Brajak pertenece por su nacionalidad de origen. Acompañaron con cantos corales y danzas típicas de su cultura.
El eje de la muestra gira en torno a la idea de que todos los dibujos del artista son en realidad un único y monumental dibujo. Al no poder concretar en Mendoza su proyecto escultórico de realizar grandes monumentos (tomando como punto de referencia la escuela escultórica y monumentalista yugoslava – croata), fue en el dibujo donde Brajak encontró la posibilidad de concretarlo mediante un desplazamiento hacia otra espacialidad: cada dibujo continúa en el siguiente, conformando así una gran y única obra.
El monumento de papel y Rotring constituye el leitmotiv de la exposición, a lo que se suma el contenido de los dibujos: el recuerdo de los momentos de descanso en el campo durante su infancia pastoril, intentando identificar figuras en las nubes; su experiencia de los paisajes de su Croacia natal y de Argentina, así como las historias de ambos países, constantemente presentes en sus reflexiones.
Drago Brajak
Escultor, dibujante, grabador y pintor de amplia trayectoria en Mendoza, nació en Karlovac, Croacia en 1945. Llega a la Argentina en 1961 y se radica en Bowen (General Alvear, Mendoza).
En 1969 inicia sus estudios en la Escuela Superior de Artes Plásticas de la Universidad Nacional de Cuyo y expone por primera vez en las municipalidades de Las Heras, Guaymallén y Gral. Alvear. Miembro de un conjunto de artistas jóvenes renovadores de la escena plástica local durante los primeros años 70, sus intereses visuales se proyectaron en una tendencia abstracta practicada a través de diferentes técnicas: desde la escultura y la serigrafía, hasta la pintura y el dibujo.
Fue miembro del grupo «4 para Gráfica» a partir de 1974, donde incursionó junto con Luis Scafati, Chalo Tulián, Carlos Gómez y Ricardo Gutiérrez (Goñi), en el campo del diseño. En 1976 fue suspendido en la Universidad Nacional de Cuyo debido a su participación en la política estudiantil durante la primera mitad de los años 70. Esto no impidió que luego, con el retorno de la democracia, logre titularse y convertirse en profesor de la Facultad de Artes y Diseño de la UNCuyo, donde además, tiempo después, llegó a ejercer como decano.