En una significativa fecha, el jefe comunal expuso el proyecto de ordenanza que busca erradicar hechos de acoso sexual callejero en la capital, mediante un programa que contempla la concientización y la prevención, como así también fuertes sanciones para los infractores.
Este miércoles 8 de marzo, en el marco del Día Internacional de la Mujer, el intendente Ulpiano Suarez presentó ante el Honorable Concejo Deliberante el proyecto de ordenanza para la creación del Programa de Concientización, Prevención, Sanción y Erradicación del Acoso Sexual Callejero en la Ciudad de Mendoza, denominado “Ciudad libre de acoso”.
«Este programa municipal viene a complementar el Código de Convivencia Ciudadana de la Ciudad, entendiendo que una sociedad que apunta a la igualdad debe estar libre de violencias. Así, se pretende impedir y erradicar el acoso sexual callejero que experimentan las personas, principalmente mujeres en el transcurso de sus vidas”, manifestó el jefe capitalino.
La normativa impulsada por Ulpiano Suarez define al acoso sexual callejero como a las conductas físicas o verbales, de naturaleza o connotación sexual basadas en el género realizadas por una o más personas en contra de otra u otras que no desean o rechazan estas conductas en tanto afectan su dignidad, sus derechos fundamentales como la libertad, integridad y libre tránsito, creando en ellas intimidación, hostilidad, degradación, humillación o un ambiente ofensivo en los espacios públicos y en los espacios privados de acceso público.
Los pilares fundamentales de este programa que complementan la normativa existente se remiten a:
Así, “Ciudad libre de acoso” se plantea los objetivos de conocer la percepción de esta problemática según las personas que viven y transitan por la Ciudad de Mendoza; elaborar un mapa georreferencial que evidencie la situación por zona y sensibilizar a la ciudadanía sobre el acoso callejero y la importancia de la corresponsabilidad, mediante la construcción de espacios de reflexión.
A partir de sondeos realizados en la capital, se cuenta con estadísticas que reflejan que el 87% de las mujeres y mujeres trans sufrieron al menos una situación de acoso sexual callejero. Estas prácticas son padecidas de manera sistemática y, según entrevistas realizadas, desde los nueve años de edad la mayoría de las mujeres comienza a sentirse expuesta e insegura en el espacio público. En pos de ello y de lograr una sociedad igualitaria y libre de violencias, es que resulta necesaria la regulación e incorporación en el Código de Convivencia de esta conducta y su pertinente sanción. Así, se establece:
(…) la realización de las conductas descriptas, es constitutiva de infracción grave. Y la sanción será muy grave cuando la realización de las conductas tipificadas sea realizada por dos o más personas.
Una particularidad del proyecto es que en todos los casos el infractor sancionado con multa, deberá además efectuar una jornada de capacitación obligatoria que será dictada por la Coordinación de Género y Diversidad dependiente de la Secretaría de Gobierno.