La propuesta contó con un gran número de asistentes, que compartieron esta práctica en la terraza municipal. La palabra de los participantes sobre esta gran experiencia.

Este miércoles por la tarde, la terraza Jardín Mirador de la Ciudad de Mendoza contó con una nueva experiencia de Yoga en las Alturas. Más de 50 personas asistieron para practicar esta disciplina de una forma distinta, disfrutando del paisaje y la tranquilidad que ofrece este espacio del edifico municipal.

Asistentes de todas las edades se dieron cita para compartir y disfrutar de esta práctica que reúne importantes beneficios a nivel físico, mental y espiritual, bajo la guía de la instructora Clara Pisi.

«Está muy bueno que se realicen estas actividades para los tiempos que estamos viviendo, además, es genial que sea de entrada libre y gratuita para que se sume cada vez más gente. Esto aporta una cuota de serenidad, de calma, de tranquilidad, que sirve para muchas cosas, entre ellas aprender a respirar», comentó Pisi.

Asimismo, comentó: «Hoy hicimos cosas que todos podían y que nos permitieron recibir beneficios. Acá la gente se comunica energéticamente, uno exhala el aire del otro y viceversa y, de esta manera, sí o sí se comparte energía. Antes se entendía que el yoga era para personas grandes y no es así. Esto es activo, te desafía, te enseña cuáles son tus límites y querer superarlos, pero sobre todo te enseña a cuidarte«.

Además, los participantes también contaron su experiencia con la propuesta. “Personalmente, hace 20 años que hago yoga, me hace bien en la parte espiritual y en la mental ayuda muchísimo. Nos avisó la profesora que tenemos en el centro cultural sobre esta actividad. Yo pinto y me gustan los paisajes, los colores, el aire libre, así que me encantó la experiencia, la profesora espectacular y los ejercicios muy buenos”, contó Alicia.

Por su parte, Andrea compartió: “Hago yoga hace 10 años ininterrumpidos. Me resulta bien para la salud. Inicié después de que me operaron de cáncer y fue la manera en la que fui moviendo mi cuerpo. No había venido antes y nunca había subido a esta terraza. La verdad que es una belleza el paisaje que se puede ver desde acá. Fue una experiencia hermosa”.

En tanto que Teresita, profesora de yoga que asistió al evento, expresó: “Me encantó. Sabemos que el yoga está en auge para toda la gente. Es una disciplina que hace muy bien a todos, donde se trabaja cuerpo, mente y alma. En enero tomamos vacaciones y queríamos hacer algo e invité a las alumnas a venir a la clase”.

El próximo encuentro se llevará a cabo el miércoles 25 de enero, en la Reserva Divisadero Largo. Las entradas estarán disponibles próximamente en el sitio Entrada Web, teniendo en cuenta que el cupo será de 30 personas.