Desde el domingo 21 de febrero la procesión de la Virgen de la Carrodilla recorrió distintos puntos de la provincia, pasando por fincas y bodegas, capillas, templos y comunas departamentales. Además de la importancia en sí, esta peregrinación toma otra dimensión, ya que, es la primera que se hace luego de 8 años, la última había sido realizada en 2008.
Como cierre del itinerario, la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza ofreció un homenaje frente a la parroquia Santiago Apóstol y San Nicolás, en la peatonal Sarmiento. Allí, el Ballet Municipal brindó un espectáculo de recepción acompañado de música en vivo.
Participaron de la actividad: la secretaria de Cultura y Turismo de la Ciudad, Mariana Juri; y, personal de Fecovita, quienes aprovecharon para pedir por una buena cosecha durante este año. Posteriormente, la Virgen fue trasladada a la secretaria de Turismo donde también se realizó una recepción con la presencia de Gabriela Testa, Presidenta del Ente Autárquico de Turismo.
Virgen de la Carrodilla
En 1938, el departamento de Luján de Cuyo consagró a la Virgen de la Carrodilla como Patrona de los Viñedos de la Argentina y, en el mismo año, las autoridades eclesiásticas reconocieron la transformación regional de “carrocilla ” como una nueva advocación de la Virgen María. De este modo, la provincia declaró a su Patrona Celestial de los Viñedos y la coronó con pámpanos y racimos de uva por monseñor José Aníbal Verdaguer, primer obispo de la provincia.
Desde esa fecha, la imagen preside los actos de la Fiesta Nacional de la Vendimia, y su presentación es acompañada por las estrofas de la canción compuesta por el músico Hilario Cuadros y escrita por Julio Quintanilla.