La actividad a cargo de la artista  Micaela Ripamonti tendrá dos encuentros, el 23 de marzo y el 13 de abril. La entrada es libre y gratuita.

La Ciudad de Mendoza te trae una entretenida propuesta para disfrutar los próximos miércoles 23 de marzo y 13 de abril en la Sala Equis del Anexo MMAMM, ubicado en el Parque Central. Se trata de “Jardín de interior, un ensayo visual sobre el cuerpo» de Micaela Ripamonti, actividad que consta de dos encuentros que se llevarán a cabo en el horario de 17 a 20, con entrada libre y gratuita.

En la primera cita, el público presente será invitado por la artista a participar de un espacio lúdico y experimental para explorar las distintas posibilidades de representación del cuerpo humano, a través de la creación colectiva de esculturas efímeras en arcilla. El modelado de la figura humana es una práctica abordada históricamente por las academias de arte y por todas las culturas existentes, con matices que han establecido distintas nociones de belleza y de corporalidades a las cuales adorar o destacar.

Este encuentro propone cuestionar el concepto hegemónico del cuerpo humano y abordar la idea de autopercepción del mismo, a través de la creación libre y desestereotipada de figuras. Las mismas permanecerán expuestas en la sala y serán instaladas en un jardín de interior creado con la intención de que el paso del tiempo, la humedad y la materia orgánica actúen sobre las esculturas.

Se pondrán a disposición de los asistentes algunas piezas iniciadas por la artista a las que les podrán agregar brazos, piernas, facciones, pelo. A su vez, tendrán la posibilidad de hacer y deshacer el cuerpo que decidan, con el acompañamiento de Ripamonti. También, habrá esquejes de plantas, tierra fértil y herramientas para utilizar. Las piezas elaboradas quedarán en exhibición en la Sala Equis hasta el segundo encuentro de cierre de esta acción-instalación artística.

En la segunda fecha de la propuesta, a partir de las piezas realizadas en la primera actividad, los asistentes participarán de la acción artística de desarme de los cuerpos representados para transformarlos en otra cosa: una montaña, un barco, una casa, etc.

Con este trabajo colectivo de transformación y reutilización de los elementos, se busca remarcar el carácter efímero de la obra, su inestabilidad y su potencial creativo de cambio. Así como la arcilla puede volverse plástica nuevamente, modelarse a gusto y placer, se busca reflexionar acerca de estructuras o mandatos que parecieran inmutables, tal como las nociones únicas de belleza y las bases del patriarcado: duras, secas, inhóspitas, infértiles, inamovibles, las cuales son posibles de afectarse, humectarse y volverse blandas para generar una transformación.