Vecinos y vecinas se sumaron a la agenda de actividades planificadas por la municipalidad, en la que cada rincón de la Ciudad de Mendoza se convirtió en un espacio amigable, en el marco de la “Semana por la Promoción de los Derechos de las Personas con Discapacidad”.
Las políticas públicas en materia de inclusión social, que lleva adelante la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, hicieron posible organizar y planear diferentes eventos que convirtieron a la capital mendocina en un lugar amigable, solidario e inclusivo.
Así es como, durante una semana, la muni desplegó una serie de acciones que finalizaron este viernes con una jornada recreativa en el Parque Urbano. Niños, niñas y adultos disfrutaron de una muestra deportiva, una “hora silenciosa” para niños y niñas con TEA (Trastorno del Espectro Autista), actividades de iniciación al skate, ambientación al uso de las pistas y circulación abierta por las mismas, una muestra de patín artístico, “picaditos” de fútbol adaptado, una clase abierta de ritmos latinos, entre otras propuestas.
Respecto a cómo se vivió la semana de las personas con discapacidad, el coordinador de Inclusión y Accesibilidad, Nicolás Reynaga contó: «Las actividades se realizaron con mucha alegría y compromiso de parte de todo el municipio y de los vecinos y vecinas. Se hizo un gran trabajo. Cada evento se disfrutó a lo grande y no hubo diferencia entre personas con y sin discapacidad”.
Entre las propuestas que se realizaron durante esta semana y previo al cierre en el Parque Urbano, se destacaron la master class, donde se juntaron alrededor de 250 juguetes; una intervención por todos los pisos de la comuna, en la cual chicos y chicas con discapacidad bailaron folclore y contemporáneo; y el Festival por la Inclusión desarrollado el domingo, donde más de 300 personas pudieron disfrutar de la actuación de los DJ´s Pendola y Brian Owen.
Fue en el Parque Urbano donde finalizó esta semana con bailes, juegos, deportes urbanos y demás actividades recreativas y deportivas. En esta celebración, los chicos de los diferentes talleres mostraron lo aprendido no sólo a nivel deportivo, sino también ambiental.
A través de un picnic inclusivo, junto a las organizaciones Thadi, Mundo Alas y jóvenes del taller Somos Uno del CIC 1, compartieron sus derechos como personas con discapacidad plasmadas en deportes, murales y otras propuestas relacionadas con la estimulación y recreación de las personas.