Culminó el ciclo de acompañamiento para familiares de personas con TEA en la Ciudad. El conjunto de talleres brindado por Fundación Marea Azul llegó a su fin con una emotiva despedida.
Con una amplia concurrencia de participantes, el encuentro contó con dos partes: una de aprendizaje y otra de diálogo y celebración. Así, comenzó con un taller de comunicación aumentativa y lenguaje, brindando esta poderosa herramienta que empodera a las personas con dificultades de comunicación. Y culminó con un espacio de preguntas, respuestas y palabras de despedida.
Marita, una de las participantes que asistió a todas las charlas por su nieto con TEA, expresó: “Ustedes no tienen dimensión de lo que significa lo que están haciendo por nosotros. Mi nieto vive en Chile y gracias a ustedes en cada visita me pude acercar no solo a mi nieto sino también a mi hija”.
Por su parte, Elisa Espina, una de las fundadoras de Marea, manifestó emocionada: “Desde nuestro lugar, poder achicarles un poquito el camino para las personas que recién reciben un diagnóstico es sumamente valioso. Se van generando redes de contención en las familias, a donde llevan herramientas y se van animando, van perdiendo miedos y comprendiendo que no están solos, que somos muchos los que estamos en este camino y que siempre, lo que sea compartido y colaborativo es mucho mejor”.
Continuó: “Estamos agradecidas a la Municipalidad, al área, por brindarnos el espacio, porque es una manera de poder brindar herramientas. Nos vamos muy felices por la concurrencia que hemos tenido, los temas que se han abordado y creemos que es muy importante seguir por este camino que es el que las familias han pedido”.
Finalmente, Silvina Romera, responsable del Espacio de Convergencia Social, sostuvo: “Me parece muy lindo lo que han hecho en este espacio, que cumplió con ser un lugar donde las personas encontraran refugio y respuestas en temas de derechos”.
Acerca del ciclo
El Ciclo de acompañamiento para familiares de personas con TEA surgió tras el taller “¿Quién cuida al que cuida?”, celebrado por Elisa Espina y Selena Chaves, socias fundadoras de la Fundación Marea Azul. Fue el primer evento celebrado en el espacio ECoS de la Ciudad y tuvo una gran repercusión, alcanzando en cada encuentro a decenas de familias.
En cada taller, las referentes atravesaron todas las áreas transversales al tratamiento de una persona con autismo a la hora de recibir el diagnóstico, entendiendo la importancia de que los cuidadores deben cuidarse para cuidar al otro.
Para ello, abordaron temas de educación, de normativas, de derechos, de manejo de la conducta, de estrategias de comunicación y lenguaje. Y brindaron información, herramientas y un espacio de contención y acompañamiento.