En un emotivo homenaje, se descubrió la placa que lleva el nombre de la escritora. «Ella es esto, es un teatro», agradeció el hijo de la artista, Hugo Estrella.
El teatro, ese territorio mágico que Susana Tampieri descubrió en su infancia, le rinde hoy homenaje. Y es que la Sala Dos de la Nave Cultural fue bautizada con el nombre de la dramaturga esta mañana en un emotivo acto organizado por la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza. El legado de la escritora será custodio de aquí en adelante de las historias que se cuenten sobre dicho escenario.
Familiares y amigos de la artista, que falleció a sus 86 años a finales de noviembre de 2020, asistieron al espacio ubicado en el corazón del parque Central. Junto con autoridades municipales, conmemoraron la trayectoria de la referente del arte dramático y su incansable lucha por los derechos de las mujeres. No dejaron de destacar la impronta de su pluma aguda, su creatividad y el ingenio de su humor, un humor que provocaba la reflexión del público.
El acto comenzó en el hall de la Nave Cultural con las palabras de la diputada provincial Ana María Andía y de la presidenta del Honorable Concejo Deliberante de Ciudad, Beatriz Martínez. Luego de los discursos, la funcionaria capitalina y el hijo de la dramaturga, Hugo Estrella, descubrieron la placa que lleva el nombre de la escritora.
El homenaje continuó en el interior de la recientemente bautizada sala. La voz del director Rafael Rodríguez acompañó a los invitados en su ingreso, con un sentido mensaje a Susana. Posteriormente, el dúo de piano y percusión Morcos Sánchez brindó un homenaje desde la música. También se subió al escenario Marcelo Hernández, alumno y amigo de la artista, para recordarla y presentar un video con mensajes en memoria de Tampieri.
Hugo Estrella cerró el acto con palabras de agradecimiento por la iniciativa de que la Sala Dos fuera bautizada en honor a su madre. «Ella es esto, es un teatro. Antes de fallecer, le dije ‘¿Te gustaría que tu nombre estuviera en un teatro?’ y se le iluminó la cara», relató con gran emoción. «Es el mejor homenaje que puede tener porque su vida fue, fundamentalmente, la lucha por el teatro, escribir para el teatro y pelear para que se ponga en escena el teatro mendocino», destacó luego.
Para la Ciudad de Mendoza, este fue un acto especial, ya que Susana fue la primera directora de Cultura del municipio en el retorno a la democracia (1983). Desde su lugar, contribuyó a la fortalecer la escena artística mendocina, con gran entrega y compromiso. Sin duda alguna, sus convicciones e ideales construyeron cimientos sobre los que aún hoy se sostienen el arte dramático y la literatura locales.
«Hoy es un día muy especial porque hemos vivido un momento sumamente emocionante. Las palabras de su hijo y todo el homenaje que se efectuó para que hoy la Sala Dos de la Nave Cultural lleve el nombre de Susana Tampieri han significado emoción para todos los que estuvimos presentes. Esto marcó un antecedente importantísimo para la Ciudad de Mendoza y es el valor que se les da a la cultura y a las personas que han ejercido por ella una vida», expresó la actual directora de Cultura de Capital, Laura Fuertes.