Si bien el uso de los horarios cortados en la mayoría de los comercios de la ciudad es un hábito con cierto arraigo cultural, existen distintos enfoques que coinciden en resaltar la importancia que tiene para una metrópoli y sus habitantes el uso del horario corrido. En este sentido, la experiencia de la cuarentena por la COVID-19, produjo un cambio de paradigma en el uso de los horarios de los comercios y brinda una oportunidad para auspiciar un nuevo enfoque que perdure en el tiempo y ofrezca beneficios para todos.

Con respecto a esto, el intendente de la Ciudad de Mendoza, Ulpiano Suarez, ha mostrado la firme convicción de avanzar hacia esta transformación que considera un eslabón fundamental en la evolución de la ciudad. “Entendemos que es un momento bisagra para dar el paso hacia el cambio cultural que necesitamos. Desde que asumí como intendente me he planteado desafíos con el eje puesto en lograr una ciudad que promueva de manera equilibrada e integral el desarrollo económico y el cuidado del ambiente, esta propuesta va en ese sentido”.

Los beneficios, según ya lo han expresado organizaciones que nuclean a comerciantes e industriales, son muy amplios. Entre ellos se menciona, una mejor calidad de vida para los empleados y aumento del tiempo a compartir con sus afectos, y para realizar otras actividades.  Asimismo, se destaca que permitiría salir y regresar a sus hogares con luz solar, brindando así mayor seguridad a las personas. Además, posibilitaría a los trabajadores gastar menos en transporte, ya que sólo deberían realizar dos viajes, entre otras notables ventajas.

La apuesta del mandatario capitalino, además contempla el horario escalonado para el ingreso a los colegios, la administración pública, los bancos y otras instituciones que forman parte del entorno socioeconómico de la ciudad. En este caso, estas nuevas dinámicas propiciarían que no se generen embotellamientos y, en efecto, se reduzca la contaminación tanto sonora como ambiental, generando condiciones óptimas y seguras para el traslado. De esta manera, también el servicio de transporte público será más eficiente y no colapsará ya que los usuarios se desplazarán en distintos horarios y habrá espacio para todos.

Por otra parte, entendiendo a la salud y bienestar como ejes de una ciudad sostenible, es importante mencionar los distintos beneficios asociados sobre la población. Los procesos físicos, mentales y biológicos se encuentran condicionados a la luz solar, traduciéndose en mejores niveles de rendimiento en nuestro comportamiento. En este sentido, generar una franja horaria extendida y adecuar la misma a nuestras tareas de trabajo, compras, ejercitación, recreación y disfrute familiar implica un paso fundamental en nuestra organización diaria.

Esta propuesta también está enmarcada en la «Declaración de la emergencia climática» que realizó el intendente Suarez hace unos meses. En efecto, el horario corrido reduciría en muchos casos en un 50 % la cantidad de viajes de los trabajadores y atenuaría notablemente la contaminación. Del mismo modo, generaría mayor eficiencia energética y un consecuente ahorro energético producto del aprovechamiento de la radiación solar, luz y temperatura asociada.

Por último, el intendente considera que, adecuando estos horarios de las actividades durante el año para aprovechar la luz solar, no sería necesario el cambio de huso horario, tema debatido durante años en la provincia.