La Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, en conjunto con Reciclemos y Fridays for the Future, llevó a cabo este sábado una campaña por las calles del microcentro en la que se recolectaron miles de colillas de cigarrillos. Este deshecho es una de las basuras más contaminantes del mundo, ya que una sola colilla es capaz de contaminar hasta 50 litros de agua. A su vez, sus lixiviados (líquidos resultantes del contacto con el agua) contienen más de 7.000 elementos tóxicos letales que se liberan rápidamente.
Ante esta realidad, y en el contexto de la emergencia climática de la Ciudad, se realizó esta acción concreta que busca visibilizar el problema, generar conciencia y cambiar el hábito de los fumadores que arrojan las colillas a la vía pública en lugar de depositarlas en los basureros.
El intendente de la Ciudad, Ulpiano Suarez, participó del circuito que se inició en la plaza Independencia y recorrió los alrededores. «Estamos en la plaza Independencia y en esta mañana de sábado, con un nutrido grupo de jóvenes de la entidad Viernes por el Futuro y de Reciclemos hemos caminado por la Ciudad, hablando con los vecinos, con los turistas y recolectando colillas de cigarrillos, que es uno de los residuos más contaminantes del mundo. Estas colillas van a ser recicladas y transformadas en ladrillos ecológicos. Esta acción que hemos realizado se da en el marco de la emergencia climática que hemos declarado en la Ciudad de Mendoza. en la que dentro de poco no se podrá fumar en los parques y en las plazas, que queremos que sigan siendo espacios saludables y libres de humo. Vamos a trabajar fuertemente para que las colillas de cigarrillos sean depositadas en dispositivos creados específicamente para esa finalidad», subrayó Suarez.
Por su parte, Alexis Lemos, al frente de Reciclemos, explicó: «Esta es una recolección a nivel nacional y en cada ciudad hay un embajador, acá en Mendoza es Friday for the future, la iniciativa de Greta Thunberg. Entonces en conjunto con la municipalidad hacemos esta recolección para poder descontaminar un poco en este contexto de la emergencia climática. En el proyecto Reciclemos lo que hacemos es transformar las colillas, mediante microorganismos, en biopolímeros aislantes que luego usamos para la producción de ladrillos ecológicos para la construcción. Es un método único en el mundo que creamos acá en Mendoza así que estamos innovando con el municipio».
«Por eso buscamos concientizar a la gente, que haya colilleros instalados para la captación de las colillas y dar a conocer lo peligroso que es este deshecho complejo por las cantidades que se producen. En Argentina hay más de 12 millones de fumadores y la colilla, que no es biodegradable, está catalogada como el deshecho número 1 en el mundo. Es un ítem pequeño pero un problema grande así que hay que actuar al respecto, modificar los hábitos y generar conciencia, más en el verano con el peligro de incendios forestales», agregó Lemos mientras recolectaba colillas de las veredas de calle Necochea. En menos de una hora y solamente en unas pocas cuadras, Alexis llenó una botella plástica grande con más de 800 colillas.
Más de 5 trillones de colillas de cigarrillos son desechadas cada año, produciendo un grave problema para la salud pública y suponiendo un desafío económico, ecológico y social de primer nivel. Por eso la Ciudad de Mendoza se sumó a la recolección nacional de colillas más grande jamás hecha para darles reciclaje gratuito y natural en conjunto con las principales agrupaciones ecológicas del país.