La muestra tuvo una variada gama de trabajos, desde carpintería y tejido al crochet, hasta porcelana en frío y macramé.  La Municipalidad a través de estos espacios brinda salidas laborales que sean de utilidad a los asistentes.

Los talleres sociales de la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, finalizaron el año con una muestra en la plaza Independencia que deslumbró a los presentes, no sólo por la belleza estética sino por la variada cantidad de productos ofrecidos. Hubo elementos de mimbrería, carpintería, tejido al crochet, porcelana en frío, bordado en cinta, macramé, taller de todo blanco y pintura decorativa.

Todos los trabajos son realizados por los alumnos de los talleres que se dictan durante todo el año en distintos barrios y espacios de la Ciudad. El fin del programa es ofrecer salidas laborales que sean de utilidad para los concurrentes. Así, se fomenta el trabajo manual-artesanal en la comunidad; propiciando lazos socioafectivos en un aprendizaje creativo cultural.

Los talleres están pensados para toda la comunidad de la ciudad de Mendoza: adolescentes, jóvenes, adultos y adultos mayores. Y además de posibilitar una fuente laboral sirve para establecer un espacio creativo, participativo y de contención para diferentes edades. De esta manera se aumentan las  capacidades y se incrementa la autoestima y valoración personal, creando redes de solidaridad como herramientas de interacción.

La voz de los participantes

Isabel Soriano

“He hecho varios talleres: porcelana en frío, bordado en cinta, pintura y tejido. Me ha servido mucho para aprender, hay cosas que uno no sabe que tiene adentro suyo. Me parecen muy lindo los talleres de la municipalidad para ayudar a la gente y además que tenga salida laboral”

Erica Carrera

“Hace tres años que estoy en los talleres y me dedico al tejido y macramé, además de lo artístico me ha servido como salida laboral. Me ha ayudado muchísimo”.

Olga

“Para mí ha significado mucho porque me ha ayudado a salir de la depresión, tengo 30 años y hace cinco años que estoy en los talleres de la Estación Cultural. Aprendí la técnica de porcelana en frío y ahora puedo vender mis productos”.