Baile, ritmo, agite. Cuerpos que se movían sin parar. No importaba si era el rock de Pasado Verde, el hip hop de DJ Stuart con el freestyle de Lity, el electro pop de Miami Horror o la cumbia de Faauna. La Vendimia Urbana, organizada por la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza, en su sexta edición convocó en la Nave Cultural a más de cinco mil almas que se dedicaron a disfrutar de una iniciativa integral para todo público.

Desde las 16, con estricta puntualidad, las canciones potentes y contagiosas de Fuego en Moscú dieron comienzo a una nueva edición de la Vendimia Urbana, la primera que contó en su grilla con una banda internacional: los australianos de Miami Horror. Durante toda la jornada del sábado se desarrollaron impecables recitales acompañados por una oferta interesante de gastronomía y bebidas, así como opciones propias de la cultura urbana como tatuajes en vivo, una exhibición de fotografías y skates intervenidas, un mural que fue pintado en vivo por el artista Fede Calandria junto con su equipo y hasta la lookería Ovni que le dio un toque personal y distintivo a muchos de los que se animaron a probar «raros peinados nuevos».  

Alrededor de las 20, luego de un intenso y pulcro recital del ascendente grupo mendocino Pasado Verde, subió a escena la banda invitada liderada por el bajista Benjamin Plant y encabezada por el histriónico cantante y guitarrista Josh Moriarty. Miami Horror dejó todo en un set en vivo potente y divertidísimo que puso a todos a bailar con su repertorio que combina dosis perfectas de pop, música electrónica y algo de funk. El vocalista se puso el show al hombro y no paró hasta llamar la atención de cada uno de los espectadores, no sólo con su gran performance musical, sino también con sus pasos de baile y hasta un momento de locura en el que más de uno se asustó, ya que se trepó hasta lo más alto de la estructura del escenario y desde allí empezó a bailar y moverse con toda su inagotable energía. 

Durante más de una hora sonaron canciones de toda su carrera y sobre todo de su más reciente producción, «The Shapes», entre ellas «Sign of the times» y la contagiosa «Leila», el primer sencillo. Pasadas las 21, con su recital concluido, los australianos salieron a saludar al público y se sacaron fotos con absolutamente todos los que se lo pidieron, demostrando gran calidez y cercanía con sus fans.

Minutos después la pantalla anunciaba el nombre de la banda que cerraría la Vendimia Urbana 2017: Faauna. La dupla le puso ritmo cumbiero al escenario y continuó la fiesta bailable que encendió Miami Horror. Gran aporte el de la compañía F.L.O.W. Altas Wachas, con dos de sus bailarinas luciendo una virtuosa danza urbana y haciendo twerk, lo que incrementó la temperatura del show en muchas de las canciones más irresistibles a la hora de moverse como «San Pedro», «Hongo x hongo», «El salame» y «El Gauchito gil», entre otras. Una vez más el festival demostró que los grupos locales están a la altura de la circunstancia y pueden ser tranquilamente el número final de un encuentro de esta magnitud, no sólo por el resultado musical sino también por la convocatoria.