Inspectores de comercio y preventores de seguridad secuestraron 245 celulares de dudosa procedencia, en comercios de las ferias persas de calle General Paz, en el marco de un operativo realizado en esa zona del microcentro.
Esta acción tiene como punto de partida el decreto 1013, que establece la creación de un registro de comercialización de bienes usados. De esta manera, los comercios que compran y venden productos usados deben tener un libro donde consten todos los datos de las personas que venden determinados bienes.
De esta manera, cuando el comerciante no puede constatar la procedencia de los bienes que tiene en su negocio, los inspectores proceden al decomiso de los mismos.
“El objetivo de este tipo de operativos es proteger la transparencia de las actividades dedicadas a las comercialización de este tipo de productos y evitar la proliferación de hechos delictivos”, afirmó el Secretario de Seguridad Ciudadana, Raúl Levrino, que agregó: “Estos mecanismos tienden a eliminar la posibilidad de que los objetos que surgen del delito se puedan vender”.
Hace algunos días, el municipio había secuestrado 100 celulares también de dudosa procedencia, en locales de la Galería Tonsa. Como los productos de telefonía celular son lo más denunciados por robo o extravío, es que el municipio continuará con este tipo de controles en distintos comercios del rubro.