La lic. Beatriz Martínez, presidenta del Honorable Concejo Deliberante manifestó que “el objetivo es reconocer a aquellos padres que constituyen un ejemplo de vida, que son modelos a seguir por su desempeño como papás y que conducen a sus hijos por el camino adecuado, inculcándoles los valores necesarios para ser ciudadanos solidarios, responsables y honestos”.
Los organismos públicos o privados: escuelas, colegios, comisiones de padres, cooperadoras escolares, centro de estudiantes, asociaciones gremiales, uniones vecinales, organizaciones no gubernamentales y otras instituciones intermedias registradas ante las autoridades de Control del Gobierno de la Provincia de Mendoza, nominaron a aquellos papás que a su criterio contaban con las características para ser destacados. El único requisito fue que los nominados debían residir o haber residido en la capital mendocina.
La idea fue un éxito, ya que el HCD recibió doce historias conmovedoras que serán leídas (sólo un fragmento de ellas) en la sesión especial que se hará el miércoles 24 de agosto a las 11.30 horas.
Será una sesión corta donde el intendente Rodolfo Suarez entregará las correspondientes distinciones legislativas. Es la primera vez que la Capital distinguirá a los padres ejemplares.
“Las doce historias sensibilizaron a los concejales encargados de la decisión final”, dijo Beatriz Martínez. A continuación transcribimos un breve fragmento de uno de los relatos (no daremos nombre) que resume el espíritu del concurso “Padre del año”.
“Ha sido muy difícil elegir a un sólo papá que represente al barrio porque todos son merecedores de ese honor”, dice la carta dirigida a la presidencia del HCD. A pesar de eso, un papá fue elegido y descripto de la siguiente manera: “Es un hombre que profundiza muchos valores que tenía incorporados en su casa como el respeto y el amor a su familia. Él trata de darles una buena vida y estudios a sus hijos porque es la mayor herencia que uno pueda dejarles, ya que el amor debe ser permanente”.
El protagonista del relato, dice: “Un papá no sólo ama a sus hijos , sino que vela por la integridad física y emocional de ellos. Les brinda un hogar seguro, educación y salud. Les asegura un porvenir con valores que harán que esos niños sean futuros hombres y mujeres respetuosos, solidarios, educados”.