El trabajo pretende no sólo garantizar la estabilidad estructural del complejo, por estar ubicado en una zona sísmica definida como de primera categoría, sino también a conseguir una mejor lectura de la tipología arquitectónica utilizando materiales livianos de eficacia comprobada como son los perfiles de acero.
La actual propuesta, de refuerzo y consolidación de las ruinas, contempla el criterio de mínima intervención y está orientada no sólo a conservar los atributos técnicos y estéticos de las ruinas sino también a optimizar la lectura del visitante.
“Estamos reemplazando la estructura provisoria que se instaló en 1978, por una permanente. La iniciativa surgió porque detectamos que la estructura de caño cumplía con su función de sostén pero interfería visualmente, no permitía apreciar la verdadera magnitud de las ruinas”, explicó Horacio Chiavazza, Director del Centro de Investigaciones Ruinas de San Francisco que depende de la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza.
La eficacia buscada con esta técnica que tenía carácter provisorio, tampoco cumple ya con su objetivo. Por este motivo, los especialistas afirman que resulta imprescindible sustituirla por un sistema de bajo impacto y alta eficiencia, liberando las ruinas de este apuntalamiento interino de caños.
La intervención consiste en consolidar y representar formalmente la situación original con estructura metálica (perfiles W 150×22,5), parte de la galería del claustro partiendo del ángulo de la portería hasta cubrir el ingreso a la caja de escalera que conducía al coro y campanario. También se apuntalarán elementos aislados, se reconstruirá con componentes restructurales el sector del coro, nave central y nave lateral, detalló el arquitecto Pedro Canepucia, director del proyecto de Ciudad de Mendoza.
El criterio estructural incluye calar los muros existentes para lograr la continuidad de los perfiles, hecho que posibilita fusionar estructura metálica y ruina de mampostería.
Es importante resaltar, que la primera etapa de trabajo finalizará a fines de septiembre, y luego se continuará con una segunda etapa donde se realizará la iluminación artística de las ruinas para que se luzcan también en horario nocturno.
Cabe destacar, que las Ruinas de San Francisco fueron declaradas Monumento Histórico Nacional por Decreto Nº 107.512/41 de la Presidencia de la Nación.
Datos estadísticos
33.000 personas visitaron el museo del área fundacional, de las cuales:
Mejoras anteriores
Las ruinas experimentaron varias intervenciones. En la década del 70 se incorporaron a las ruinas, con el objeto de consolidarlas, elementos de hormigón armado que han dañado y alterado las proporciones de las ruinas. Más tarde y luego de la liberación del predio de usos incompatibles como un gimnasio, se definió virtualmente el antiguo claustro y se desarrolló un centro interpretativo para el rescate y conservación de su patrimonio.
En el año 1998 se realizaron los trabajos de instalación del método de apuntalamiento existente en la actualidad, por medio de un sistema de plateas, caños de acero y nudos, se levantaron estructuras que sirvieron de apoyo a las ruinas.